Te ha pasado que estás viendo a alguien hacer algo de forma incorrecta e inmediatamente sientes la necesidad de intervenir para hacerlo tú mismo. Este es un escenario común tanto en entornos laborales como familiares.
Y aunque nuestra intención es buena, no nos damos cuenta de que estamos quitándole la oportunidad a dicha persona de resolverlo por sí mismo, de aprender de sus errores y, sobre todo, le estamos quitando un objetivo por superar; un propósito.
Cuando los hijos se hacen grandes suelen tener la intención de dar todo lo que puedan a sus padres para que estos no tengan que preocuparse por nada más. Es una forma decir: gracias por ayudarme por tantos años, ahora me toca a mí. Sin embargo, este gesto de amor tiene un impacto imprevisto, el cual es que poco a poco los padres comienzan a sentir que ya no son útiles para sus hijos.
Ten presente lo anterior, porque el mayor motor de todo ser humano, para seguir con vida, es tener un propósito. Como consecuencia, cuando nos lo quitan, la vejez golpea con más fuerza y sentimos que el mundo ya no nos necesita.
Así que la próxima vez que veas alguien hacer algo de forma errónea, ya sea a un colaborador, un hijo, un padre, un amigo o cualquier otra persona, no intentes resolverle la situación tú mismo. En lugar de ello, confía plenamente en el potencial de esta persona y simplemente ofrécete como un soporte, como un ayudante, dales herramientas y permite que sean ellos los que resuelvan sus propios retos, porque solo así aprenderán y solo así mantendrán su sentido de valía personal.
Finalmente, recuerda que uno de los mejores regalos que puedes dar a una persona es un propósito por el cual vivir. Por lo tanto, si alguien ofrece ayudarte, especialmente como un colaborador o un padre, aun si no necesitas ayuda, dales la oportunidad de hacerlo. Para ti tal vez no será mucho lo que estés haciendo, pero para ellos será un momento especial, se sentirán importantes y, principalmente, tendrán la sensación de que el mundo (y sobre todo tú) todavía los necesita con vida.
Espero tengas un día increíble, un fuerte abrazo, nos vemos mañana.