Probablemente, has escuchado la frase “finge hasta lograrlo”, dando a entender que gran parte del éxito de alcanzar una meta es actuar como el tipo de persona que ya ha logrado dicha meta.
No tengo pruebas científicas para confirmar la verdad en dicha frase, sin embargo, algo que puedo confirmar es su veracidad en temas de cambio de actitud. Y gracias a la actitud puedes lograr objetivos increíbles.
Por ejemplo, tu actitud cuando has ganado un título académico es mucho más energética que la actitud al perder un examen; en esta última tu energía es baja y probablemente no inspires a nadie más allá de intentar consolarte.
Por lo tanto, si sabes que debes prepárate para una ocasión donde tu energía debe ser 100% positiva y electrizante, una estrategia que puedes aplicar es simplemente imaginar que has logrado uno de tus objetivos más ambiciosos.
Y no solo imagines superficialmente ese logro, intenta detallarlo al máximo, visualiza el lugar, las personas que están contigo, tus sensaciones internas, lo que comerás ese día como parte del triunfo, en fin, vive en tu mente ese logro. De forma inevitable te recargarás de tanta energía que tu rostro y cuerpo no podrán disimularlo.
Pero ten cuidado, porque si imaginas momentos negativos sentirás todo lo contrario llevándote a enfermedades graves. En otras palabras, visualizar con intensidad todo lo malo que crees que te puede pasar, sin duda alguna tu cuerpo experimentará todo ello a través del estrés y la ansiedad.
En conclusión, usa el poder ilimitado de tu imaginación para tu bien. Pretende en tu mente que has obtenido tus mayores logros e inevitablemente serás el tipo de persona que alcanza estos objetivos.
Un abrazo, nos vemos mañana.