A través de las redes sociales se vuelve muy tentador expresar todo lo bueno que ocurre en tu vida, desde viajes, logros académicos, comidas especiales, fiestas, reuniones de amigos, citas de pareja, y básicamente todo lo que pueda ser percibido como éxito en la vida.
Sin embargo, más allá de solo mostrar lo positivo de nuestras vidas, sin darnos cuenta, también empezamos a mostrar el tipo de persona que aspiramos ser. Es decir, proyectamos la versión de persona que creemos es ideal para nuestra vida.
Desafortunadamente, las palabras que digas o aspiraciones que poseas no te llevan a ningún lugar si no te pones en marcha. Por eso una de las lecciones que más me impactó cuando la escuché por primera vez fue la siguiente:
Si quieres crear un cambio importante en ti y convertirte en el tipo de persona que logra metas, entonces desconectarte de todo el ruido externo (redes sociales, fiestas, televisión, citas, etc…) por 6 meses. Y en ese tiempo dedica total foco a cultivar las habilidades que se alinean 100% con el tipo de persona que aspiras ser.
A nivel personal no aplique tal cual el consejo, pero sí usé el enfoque para desconectarme significativamente de redes sociales y distracciones del día a día, durante periodos largos en diferentes momentos del año durante los últimos 4 años.
Este pequeño ejercicio, no solo me sirve para centrar mi mente hacia mis metas, sino que me ayuda a “desintoxicarme” del ruido digital que generan hoy en día las redes sociales y el internet en general.
Por lo tanto, evita pasar en redes sociales o hablando con tus amigos y familiares sobre lo bueno que ocurre tu vida y las metas que deseas alcanzar. En lugar de ello, desconéctate por completo y enfoca 100% tu atención y tiempo en hacer realidad las metas que posees. Recuerda que entre más tiempo pasas expresando lo que piensas, menos tiempos dedicas a ser la persona que realmente aspiras ser.
Un abrazo, nos vemos mañana.