En la búsqueda de la felicidad caeremos frecuentemente en el autoengaño creyendo que existe un camino fácil para llegar a donde realmente queremos estar.
En otras palabras, tendemos a buscar caminos que no nos estresen para alcanzar esos sueños que tanto ambicionamos.
Curiosamente, si vemos hacia atrás en nuestra vida, nos daremos cuenta de que las cosas realmente difíciles que hemos vivimos son las que más atesoramos.
Esos momentos, que aunque fueron críticos cuando tuvimos que enfrentarlos, se convirtieron en una victoria que hoy en día nos hace sentir orgullosos. Y con ello nos trae felicidad por nuestra superación personal.
Eso significa que realmente la felicidad yace detrás de una gran responsabilidad. Sin un objetivo ambicioso y preciado para ti, no hay emoción positiva. Una persona que realmente vive feliz y a su vez empieza a tener paz en su vida, es una persona que siempre está en busca de retos que desafíen sus capacidades.
Por supuesto, son retos que no lo hacen sentir demasiado abrumado como para caer en el estrés y la ansiedad, pero son suficientemente complejos como para obligarlo a salir de la zona de confort y desarrollar nuevas habilidades.
A nivel personal, cuando he tenido que enfrentar un reto, ya sea por un proyecto de un cliente o de mis propios emprendimientos, siempre que veo que será muy complejo tiendo a querer abandonarlo o evitarlo. Sin embargo, he aprendido a internamente convencerme de que, aun así, debo intentar enfrentarlo para encontrar el límite de mis capacidades.
Y gracias a esas experiencias logro desbloquear una nueva habilidad que no sabía que tenía y que no hubiese descubierto si no me obligaba a enfrentar dicho reto, dicha responsabilidad.
Por lo tanto, si estás en busca de la felicidad, ten presente que la única manera de experimentarla es colocándote intencionalmente más responsabilidades. Debes tener metas ambiciosas alineadas con tus valores, pasiones y talentos.
No existe camino que valga la pena recorrer donde los obstáculos son nulos; si lo encuentras rápidamente te aburrirás y podrías pensar que no hay mucho sentido en la vida. Así que enfoca tu atención en la elección correcta y constante de retos desafiantes y asume la responsabilidad de cumplirlos por tu bien y el de las personas que impactarás a lo largo de tu aventura.
Un abrazo, nos vemos mañana.