A veces tratamos de resolver una situación y nuestra mente simplemente no da más, es decir, está totalmente bloqueada. Y entre más intentes forzarla para obtener una respuesta, más se bloquea y más te frustras; especialmente si la decisión que necesitas resolver es muy importante.
Una estrategia que uso para “desenredar” mi mente en momento así, es simplemente salir a caminar. Haz una caminata sin ningún tipo de ruta, solo camina y trata de disfrutar del paisaje, trata de admirar cada detalle que vayas observando en el camino, date la oportunidad de conocer cosas que no habías visto por donde vives. Y no te preocupes por “alistarte” para salir a caminar, simplemente hazlo; de todas formas no caminarás por horas, tan solo tienes que caminar unos 10-15 minutos y regresar.
Durante esta caminata tu mente tratará de seguir pensando en la situación que buscas resolver, pero no te preocupes, tú solo trata de seguir caminando y observando cualquier cosa que atraiga tu mente. Y por supuesto, no uses el celular, trata de tener un espacio de total desconexión mientras caminas y si puedes lleva agua contigo. Todo esto dará tiempo a tu mente de despejarse, tus ojos también se relajarán un poco de las pantallas y si caminas por zonas verdes tu ansiedad incluso bajará.
Este ejercicio es extremadamente simple y justamente por ello es tan valioso, porque al regresar a tu casa, tu energía se habrá recargado y tu mente ahora tendrá una perspectiva distinta para encontrar la solución a tu problema. Inclusive, es normal que mientras caminas descubras la solución que tanto necesitas.
En conclusión, no busques soluciones estando en el mismo lugar, tu cerebro se bloqueará y empezarás a dar vueltas en círculos. En lugar de ello, dale una perspectiva distinta, haciendo algo tan aleatorio y simple como salir a caminar sin rumbo. Ten presente que tú tienes las respuestas a la mayoría de tus retos, tan solo debes crear las condiciones necesarias para que la solución se revele ante ti.
Disfruta mucho el resto de tu día, nos vemos mañana.