Justo hoy tuve una conversación sobre el sentimiento de culpabilidad que surge en nosotros cuando nos damos cuenta de que hemos perdido mucho tiempo usando las redes sociales de forma improductiva. De hecho, a veces ese sentimiento se vuelve como un golpe a nosotros mismos porque creemos que deberíamos ser más disciplinados.
Sin embargo, en este tipo de situación se vuelve muy importante dar crédito a las redes sociales como Facebook, TikTok e Instagram por su capacidad para captar nuestra atención.
Debemos tener presente que las redes sociales son gratuitas porque generan ingresos de la publicidad que pagan las empresas para anunciarse dentro de dichas redes sociales. Y la única forma de que sea viable para una empresa publicitarse dentro de una red social es que esta tenga la atención total de millones de personas todos los días.
En otras palabras, gran parte del dinero que generan los dueños de plataformas como Facebook, Instagram, YouTube, TikTok y otras, se destinan al mejoramiento del algoritmo que invita al usuario a estar más tiempo en dichas redes sociales; y es por esto que se premia con mayor alcance a todos los creadores de contenido que crean videos e imágenes que atrapan la atención de los usuarios.
Por lo tanto, debes darle crédito a las redes sociales por su capacidad para seducirte hacia su uso. No te sientas culpable por usarlas más de lo que deberías. Por supuesto que es importante reducir su uso, pero reconócete cada avance que haces, ya que no eres tú contra una aplicación, eres tú contra decenas de personas que trabajan todos los días por incrementar la adicción del público a dicha red social.
Muchas personas en el mundo estamos pasando por lo mismo que tú, intentando tener una vida más desconectada de las redes sociales y con ello también tener más paz. No es un proceso fácil, hay varias técnicas que podemos aplicar, pero lo primero por lo que debemos estar agradecidos es el hecho de que somos conscientes de que debemos crear barreras para ir eliminando esa adicción a las redes sociales. Y digo adicción porque si lo primero que intentas hacer cuando despiertas es ver tus redes sociales, ya puedes afirmar que tienes una adicción a ellas.
No obstante, debemos tener presente que las redes sociales están muy bien hechas para el fin principal que fueron creadas: generar un espacio digital donde empresas de todos los tamaños puedan publicitarse de forma efectiva ante una gran audiencia alrededor del mundo y con ello realizar ventas de los productos o servicios que los mantienen rentables.
Por ende, la próxima vez que te percates que has entrado a Instagram, Facebook o TikTok sin saber exactamente qué buscabas, maravíllate por la capacidad de dichas aplicaciones para captar tu atención, no te sientas culpable por caer ante dicho estímulo, pero inmediatamente cambia de actividad y cierra la aplicación.
Tu vida personal, incluso tu negocio, pueden sobrevivir sin redes sociales. Al final de cuentas, estas aplicaciones son una gran herramienta, sin lugar a dudas, pero debes priorizar tu salud mental sobre todas las cosas. Así que, si hoy en día las redes sociales están influyendo en tu salud, toma acción para solucionarlo, recordando que no es cualquier enemigo al que estás enfrentando.
Un fuerte abrazo, nos vemos mañana.